La cadena hotelera Accor, el sexto grupo mundial del sector, anunció hoy que la crisis del coronavirus les obliga a cerrar dos tercios de sus hoteles en todo el mundo debido a la caída de la actividad.
El presidente de la compañía, Sébastien Bazin, indicó en una rueda de prensa telefónica que “su actividad se ha visto muy, muy impactada”.
La compañía renuncia además a distribuir, como había previsto antes de la crisis sanitaria, 280 millones de euros en dividendos entre sus accionistas, y utilizará el 25 % de esa cantidad a un fondo destinado a los trabajadores, conservando los 210 millones sobrantes.
El grupo ha puesto en paro técnico o parcial a 37.500 de sus empleados en todo el mundo, lo que supone tres cuartos de sus efectivos.