Airbnb, plataforma de alquileres privados vacacionales, compartirá con la Agencia Tributaria a partir del próximo 1 de enero la información que tenga disponible sobre las transacciones de los anfitriones desde 2018.
Airbnb ha recordado hoy, en un comunicado, que el primer día de 2019 entrará en vigor la obligación de que las plataformas compartan los datos de las reservas de los anfitriones.
La ley en España está cambiando y la compañía quiere trabajar con los anfitriones para ayudarles a contribuir en la parte que les corresponde y hacer que el proceso del impuesto sobre la renta sea simple para todos, ha señalado el director de Políticas Públicas de Airbnb, Patrick Robinson.
Por ello, ha implementado una herramienta -accesible de manera individual por cada anfitrión desde su perfil- para que sea fácil proporcionar la información que las autoridades fiscales requieren.
Parte de la información que compartirá con las autoridades fiscales incluye los ingresos de los anfitriones y detalles de sus anuncios, como el nombre y la dirección.
Airbnb se ha aliado con la Asociación Española de Asesores Fiscales (Aedaf) para ayudar a los anfitriones con sus obligaciones fiscales, y con PricewaterhouseCoopers (PwC), para proporcionar una guía de impuestos, además de abrir una línea directa gratuita para aquellos que quieran obtener información fiscal adicional.
Airbnb llegó la semana pasada a un acuerdo de colaboración en Estonia que permite a los anfitriones informar automáticamente de sus ingresos a las autoridades fiscales de ese país con solo hacer clic a un botón.
A principios del mes pasado, la compañía también respaldó las propuestas en Dinamarca que ofrecen incentivos fiscales a los anfitriones que se anuncien en plataformas que compartan con el Gobierno información básica sobre cuestiones fiscales.
Asimismo, desde 2016, Airbnb informa en Irlanda sobre los ingresos generados por los anfitriones a efectos fiscales.
Los anfitriones se quedan con hasta 97 céntimos de cada euro del precio por compartir su espacio, ha explicado la plataforma, para recalcar que, a medida que continúa creciendo, quiere ser un buen socio para las comunidades y seguir trabajando junto con las autoridades fiscales en Europa.
Airbnb ya ha trabajado con más de 500 gobiernos de todo el mundo para ayudar a los anfitriones y ha automatizado la recaudación de impuestos turísticos en lugares como Lisboa, Oporto o Francia, donde remite a los gobiernos locales la tasa turística en 23.000 ciudades desde principios de este año.