La compañía aérea American Airlines ganó en el primer semestre 847 millones de dólares, un 18,4 % más interanual, aunque anunció que la prohibición de vuelo de los aviones 737 MAX de Boeing tendrá un impacto negativo de 400 millones en sus ingresos a final de año.
La primera aerolínea de Estados Unidos tuvo una ganancia de 1,89 dólares por acción, por encima de los 1,53 dólares del año pasado, cuando ganó 716 millones entre enero y junio.
Por lo que respecta a la facturación, fue de 22.544 millones de dólares, un 2,3 % superior a la del mismo periodo del año 2018.
En cuanto a sus resultados del segundo trimestre, a los que más atención prestaban los inversores de Wall Street, estos estuvieron ligeramente por encima de lo que esperaban los analistas.
American Airlines obtuvo una ganancia neta trimestral de 662 millones de dólares (18,9 % más que entre abril y junio de 2018), con una facturación de 11.960 millones de dólares (2,7 % superior).
En estos resultados, según indica el comunicado que da cuenta de sus cifras, la compañía “estima que las cancelaciones (relacionadas con la prohibición de vuelo de los Boeing 737 MAX) en el segundo trimestre impactó negativamente en el beneficio antes de impuestos con aproximadamente 175 millones de dólares”.
La compañía, que ha retirado de sus planes de vuelo los modelos relacionados con dos accidentes en Indonesia y Etiopía con centenares de muertos, estima que a cierre de año el impacto negativo en sus ingresos antes de impuestos será de cerca de 400 millones de dólares.
Por lo demás, la fuerte demanda de los pasajeros fue lo que impulsó la facturación hasta rozar los 12.000 millones, lo que la aerolínea define como “récord para un trimestre”.
El consejero delegado de la compañía, Doug Parker, agradeció el trabajo a los miembros de la empresa por conseguir estos datos a pesar de las “amenazas a corto plazo”.
Los resultados no terminaron de convencer a los inversores de Wall Street y los títulos de la compañía se deslizaban un 4,64 % a media sesión