Los atentados terroristas producidos el pasado 17 de agosto en La Rambla (Barcelona) y Cambrils no habrían tenido repercusiones en las reservas de los turistas. Eso es lo que ha afirmado el segundo teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni, quien aseguró que no se han producido cancelaciones “ni en hoteles ni en ferias ni en eventos”.
En rueda de prensa, Collboni subrayó que la normalidad detectada durante la primera semana tras el atentado se ha convertido hoy en una realidad.
Para el mes de agosto, la ocupación hotelera esperada en Barcelona era del 85 %, cifra que, según los principales agentes económicos de la ciudad, se está manteniendo.
Según el teniente de alcalde, esta situación de “cero cancelaciones” es una muestra del compromiso del conjunto de los agentes económicos de la ciudad y, también, de los visitantes del resto del mundo con Barcelona.
Asimismo, Collboni ha negado que se haya producido una bajada de precios en el sector hotelero para mantener la ocupación hotelera esperada.
A pesar de la normalidad que se está detectando en el sector turístico, Collboni ha insistido que es demasiado pronto para dar cifras definitivas sobre la afectación del atentado en la economía de la ciudad.
Es por ello que el consistorio, con el apoyo de los agentes económicos, se ha comprometido a realizar tres informes de seguimiento de la situación, que se producirán 30, 60 y 90 días después de los atentados.
Para Collboni, estos informes permitirán registrar el “pulso directo, riguroso y frío” de la actividad turística en la capital catalana, datos que determinarán si es necesario tomar medidas de carácter estacional para hacer frente al posible impacto del atentado en la llegada de turistas a la ciudad.
El teniente alcalde ha recalcado que, ante la cifras obtenidas hasta el momento, tanto el consistorio como los agentes económicos se muestran “optimistas” y “confiados” con la no afectación del atentado al sector turístico.
Para Collboni, el hecho de que el sector turístico no se haya visto afectado se entiende cuando se comprueba que, un día después de los atentados en Cataluña, La Rambla volvía a estar llena como de costumbre, lo que, en su opinión, no ha sucedido en otras ciudades europeas en las que se han producido atentados similares.