Que el hotel no sea sólo un alojamiento, sino una parte inolvidable de un viaje a Andalucía, es el objetivo que se ha propuesto la empresaria María Luisa C. Azcárate al impulsar establecimientos de gran lujo como el que ha abierto en Jerez de la Frontera (Cádiz).
La Casa Palacio María Luisa, que acaba de abrir sus puertas en pleno corazón de Jerez como hotel de cinco estrellas gran lujo, forma parte de “Kaizen Hoteles”, un proyecto que esta empresaria ha fundado y bautizado con una palabra japonesa (compuesta por kai y por zen) que significa “mejora continua”.
Kaizen Hoteles cuenta ya con un establecimiento en plena aldea del Rocío y del coto de Doñana, en Almonte (Huelva), y sumará dentro de tres años, un alojamiento en una casa señorial del siglo XVII ubicada en la céntrica Plaza de Duque de Sevilla.
Después de haber viajado por todo el mundo María Luisa C. Azcárate sabe que Andalucía es “un sitio privilegiado”, “un rincón excepcional” para el turismo.
Fundar Kaizen ha formado parte de la transformación vital de esta empresaria madrileña que ha trabajado toda su vida en la multinacional de suministros de tuberías, válvulas y accesorios para grandes industrias que fundó su padre.
Hace unos años, al morir su padre, vendió su parte en el negocio y cambió su vida.
Casada con un jerezano, fue entonces cuando decidió trasladarse a la ciudad gaditana. Cuenta que buscando casa para ella en la ciudad se encontró con el edificio que hoy la ha convertido en una empresaria de la hostelería.
“Fue amor a primera vista, me encantó. Pero era muy grande para una casa y pensé ¿por qué no hacer un hotel? siempre me ha encantado recibir en casa y viajar. La unión de estas dos pasiones que me han gustado siempre al final las ha reflejado en este hotel“, cuenta en una entrevista con EFE.
Digna de la época de mayor esplendor de Jerez, en sus orígenes, principios del siglo XIX, la casa perteneció a una familia de tratantes de vino ingleses.
En ella vivieron después importantes familias jerezanas, como los Domecq, hasta que después se convirtió en la sede de la Cámara de Comercio y después en el Casino Jerezano.
Tras una restauración de tres años, dirigida por el arquitecto sevillano Pedro Rodríguez de Pineda, el inmueble ha cobrado una nueva vida como hotel de cinco estrellas gran lujo, ofreciendo 21 habitaciones.
“He estado en muchos hoteles de cinco estrellas en el mundo, soy muy buena copiando todo lo bueno”, bromea la propietaria de este hotel en el que los clientes pueden personalizar su estancia, eligiendo sábanas de hilo o algodón, entre tres tipos de almohadas, o cuatro líneas de amenities para el baño.
Por poner un ejemplo, una noche con desayuno en la suite María Luisa, la más cara, puede costar más de 500 euros, y más de 900 euros si esa noche es en Semana Santa, cuando, gracias a la tecnología aplicada en paredes, suelos, techos y ventanas, su huésped podrá dormir en completo silencio mientras por la puerta del hotel pasan la mayor parte de las procesiones.
Aunque asegura que aún le quedan seis meses para perfeccionar los detalles de este hotel, Kaizen Hoteles ya trabaja en la ampliación de su hotel en El Rocío, con veinte habitaciones más, y en el proyecto de Sevilla, que podría ver la luz en septiembre de 2021.