Entrevista a Lucía Rigazio, departamento de reservas de La Donaira
Situada entre las provincias de Cádiz y Málaga, la Finca La Donaira consiste en un eco-retiro de lujo totalmente sostenible. Podríamos decir que, conceptualmente, La Donaira no se dedica solo al turismo, sino que presenta un concepto holístico que combina la agricultura, la educación, la equitación y la filosofía wellness en una finca de 700 hectáreas y solo nueve habitaciones.
Más allá del turista de masas, de los hoteles de cinco estrellas… se encuentra La Donaira, un cortijo del siglo XV reconvertido en un eco-retreat único en Europa. Un lugar para la desconexión, la contemplación y el contacto directo con la Naturaleza.
Las cifras en La Donaira son superlativas, con una extensión inabarcable para un alojamiento de tan solo nueve habitaciones (dos habitaciones estándar, cinco habitaciones DeLuxe – incluyendo dos yurtas en el medio de la naturaleza – y dos habitaciones Gran Deluxe) y un equipo de trabajo de casi ochenta personas para tan solo una veintena de huéspedes. Pero, más allá de ellas, lo que verdaderamente sorprende es el concepto de eco-retiro de lujo sostenible que hay detrás de este proyecto único.
En esta ocasión en Lookout Pro hemos tenido la oportunidad de entrevistar a Lucia Rigazo, que se encarga del departamento de reservas de este singular lugar perdido en la Serranía de Ronda. Argentina de nacimiento, Rigazo llegó a La Donaira como voluntaria a través del programa WWOOF que ofrece oportunidades de voluntariado internacional en granjas ecológicas. Después de dos meses dentro del programa de voluntariados, comezó a formar parte del engranaje de La Donaira como empleada. Ella es la primera persona con la que va conversar cualquier persona que desee alojare en la finca.
LOOKOUT PRO: ¿Cómo se gestiona las reservas de un eco-resort de lujo de solo nueve habitaciones?
LUCIA RIGAZIO: Desde el departamento de reservas tomamos todas las consultas que llegan por email y teléfono sobre el hotel, atendemos las consultas y realizamos las reservas.
Como no es un hotel convencional, sino que solo tiene nueve habitaciones, cada una es única y tiene sus peculiaridades. Nuestra labor en el departamento de reservas es explicarle a los clientes qué pueden encontrar en cada habitación y lograr aconsejar qué habitación es la adecuada para cada tipo de cliente. Se explica con detalle la filosofía del hotel, cómo funciona. También desde el departamento de reservas se organizan todas las actividades que el cliente desea realizar dentro de la finca y en sus alrededores.
LOOKOUT PRO:¿Qué tipo de cliente se aloja en La Donaira?
LUCIA RIGAZIO: Bueno, es muy variado, pero más que nada nuestro cliente suele ser del norte de Europa, Alemania, Reino Unido, Estados Unidos y Canadá.
LOOKOUT PRO: ¿Cuál es la estancia mínima para alojarse en La Donaira?
LUCIA RIGAZIO: Tenemos una estancia mínima de dos noches, porque nos parece que hay tantas cosas por hacer y tantas cosas que conocer. Es una finca de 700 hectáreas que con solo una noche no se puede disfrutar y conocer bien todo. Aunque la estancia mínima son dos noches, sí es verdad que la estancia media en La Donaira es de tres a cuatro noches.
LOOKOUT PRO: ¿Qué tipo de actividades reclama el cliente que se aloja en La Donaira?
LUCIA RIGAZIO: Hay mucha gente que viene a la finca en busca de nuestros caballos. La Donaira está especializada en los caballos Lusitanos.
Aunque cada huésped tenga sus propios intereses, lo cierto es que las actividades que se pueden realizar en La Donaira son muchas y seguramente las más vistosas tienen que ver con los caballos lusitanos que se crían y desarrollan en la finca. Y es que en esta finca hay más de 70 ejemplares de esta raza, la más antigua del mundo. Evidentemente, todos los viajeros que llegan hasta aquí tienen la posibilidad de dar un paseo a caballo o practicar la equitación, independientemente de su nivel.
Los no iniciados pueden optar por una relajante clase de “grounding”, una especie de yoga que se realiza sobre la grupa del caballo y que consiste en conectar con la respiración del animal en un abrazo, una práctica que funde al ser humano con el latir de estos ejemplares.
Además, al estar alojado en La Donaira, nuestros huéspedes pueden disfrutar del tiempo a ritmo slow o bien de ser miembro activo de las actividades que aquí se desarrollan, como el tour de La Dehesa Biodinámica, un proyecto de agroecología que aproxima a la agricultura biodinámica y a la permacultura, con un recorrido por la huerta tradicional, un acercamiento a la naturaleza y a los animales de la granja que equilibran los ecosistemas.
También pueden realizar el Medicinal Garden Tour y adentrarse en el mundo de las plantas y sus cualidades con Gerard Bodner, o realizar yoga, relajarse en el spa, o si el tiempo acompaña, darse un baño en la piscina de agua natural.
LOOKOUT PRO: Y no hay que olvidar que La Donaria no es un hotel como tal, se podría decir que hay que entenderlo como un espacio compartido en el que convivir con otros huéspedes. Por eso es importante entender la filosofía del lugar, como la peculiaridad de las comidas que se realizan en una mesa con todos los huéspedes, ¿cómo es acogida está iniciativa?
LUCIA RIGAZIO: Normalmente al cliente le encanta esta experiencia que es totalmente distinta a lo que puede estar acostumbrado en un hotel convencional.
Pero siempre nos adaptamos a las necesidades de los clientes, por ejemplo muchas veces vienen parejas y alguna noche nos han pedido una cena romántica y entonces le preparamos en un rincón muy bonito frente a un enorme ventanal una cena para dos. También ha habido casos en los que las familias prefieren estas solas y eso siempre se puede adaptar a los gustos de cada uno de nuestros huéspedes.
Lo normal a nuestros huéspedes les gusta mucho la idea de comer juntos y compartir una mesa exquisita con descocidos, invitando al dialogo.
LOOKOUT PRO: Además, en La Donaira también se organizan conciertos abiertos al público que no tiene porqué estar alojado, ¿En qué consiste este tipo de eventos?
LUCIA RIGAZIO: Los conciertos son variados (flamenco, jazz, blues…). La entrada al concierto tiene un precio de 30€ e incluye la recepción y recogida de los clientes en La Posada del pueblo de El Gastor ( ya que no están permitido la circulación de coches ajenos a la finca dentro de La Donaira). Una vez que los clientes llegan a la finca, los conciertos suelen tener una duración de una hora y media, dos horas y en el precio se incluyen las bebidas. La capacidad máxima para este tipo de eventos suele rondar las 20 personas.
LOOKOUT PRO:¿Qué tiene de exclusivo La Donaira?
LUCIA RIGAZIO: Lo primero el lugar donde está ubicado es 100% mágico. La Donaira es lujo, pero olvídate de los lujos de un hotel de cinco estrellas. En esta finca perdida en la serranía de Ronda la excelencia la ofrece el paisaje y una estancia en modo “slow”. Una casa donde conviven el diseño y el arte da hospedaje a unos huéspedes que pueden montar a caballo, degustar platos saludables o pasear por un jardín medicinal
La Donaira es diseño, es cuidado de cada uno de los detalles. Y para mi, lo más importante y único que las personas que se alojan pueden encontrar esa filosofía de slow travel, slow food, slow life… Aquí el mundo va a otro ritmo y todo está vinculado con la madre tierra. Muchos clientes nos han comentado sobre la calidad de nuestra cocina incomparable a ningún restaurante con estrella Michelín.
Y es que en La Donaira los alimentos ecológicos son de cosecha propia, bajo la filosofía “del campo a la mesa”, y por tanto son el punto de partida cada día para la elaboración de menús saludables e innovadores.
Lo que nuestros clientes comen depende de lo que se recolecta de nuestras huertas cada mañana y de si es temporada de higos y ciruelas o almendras y membrillo. Las flores y hierbas comestibles del jardín medicinal añaden el toque final. El pan se hornea y los huevos se recogen frescos cada mañana.
Aquí se elabora queso de cabra, se prensa el propio aceite de oliva virgen extra y se recoge miel de nuestras colmenas de montaña. Lo que no producimos en la granja, lo obtenemos de una red local de productores artesanales, por tanto cada plato es un arte.
En definitiva, ¡alojarse en La Donaira es vivir una experiencia única!
