Las vacaciones no serían lo mismo sin tu querido amigo peludo, ya sea perruno o gatuno, o con plumas, o con escamas… dejémoslo ahí porque el reino animal es muy extenso. Si no tienes claro qué destino elegir para tu mascota, o si podrá embarcar en el avión sin problemas, así como el papeleo que hay que tener en regla, aquí tienes algunos consejos interesantes.
Aunque el número de mascotas sigue aumentando en las sociedades occidentales, no es fácil encontrar una información clara y concisa sobre cómo viajar con ellas con todas las garantías y que el embarque y el desembarque de un avión, por ejemplo, no se transforme en un suplicio.
Como primeros consejos destacamos tener una previsión con meses vista, al menos un par de meses antes de hacer las maletas. Una vez ya cerca del momento del viaje, es recomendable que el animal ayune al menos un par de horas antes de viajar.
No es muy recomendable darle tranquilizantes, es mucho más positivo que vaya cansado y que antes se haya dado un largo paseo.
Respecto a la documentación más solicitada, es básico que lleves encima la cartilla sanitaria actualizada, el pasaporte para animales domésticos y un certificado actualizado de buena salud.
Vamos a centrarnos un poco más en el tema aeroportuario. Lo primerísimo es averiguar si la aerolínea con la que viajas puede transportar con garantías a tu mascota.
Pide siempre ayuda a tu veterinario de confianza con los trámites y documentos a presentar, él tiene experiencia en ello. Elige siempre un canil adecuado a las medidas y requerimientos de la aerolínea para no tener sorpresas de última hora.
Recuerda, las mascotas que pesan más de ocho kilos viajarán en la bodega del avión. Si tu mascota va en cabina, usa un canil-mochila, los hay de todos los estilos y gustos en el mercado.
Durante el vuelo es recomendable llevar un manta para aliviar el frio de tu mascota, ponen el aire tan fuerte que cualquier día aparece un pingüino por el pasillo y te pide un Frenadol.
En las escalas, aprovecha siempre para sacar a tu mascota a dar un paseo, trata que vea la luz natural durante el máximo tiempo posible.
Si el viaje es coche o autobús ten en cuenta que la mascota no debe nunca tener contacto directo con el conductor del vehículo.
Antes de emprender algún viaje largo en carretera, sería positivo que tu mascota haya experimentado viajes cortos en el auto. Acostumbrarse progresivamente a este lugar ruidoso y pequeño es vital.
Detente cada cierto tiempo para que tu mascota estire los pies. También es bueno que lleves encima algún juguete, agua y comida para los breaks durante todo el camino.
Respecto al lugar que deben ocupar en el vehículo, tu mascota en canil puede ir tanto en el suelo del vehículo como encima de los asientos, es más, hoy día existen cinturones especiales para estas tesituras.
Y para acabar recuerda que las mascotas exóticas tiene muchas más restricciones de movilidad que las domésticas. Existen empresas especializadas en la movilización de animales exóticos, te serán muy útiles en la organización y planificación de tus vacaciones si es que no puedes estar unos días sin acariciar tu tarántula…