Egipto estuvo presente en la 40ª edición de FITUR, la feria de turismo más importante de España. El país no sólo mostró sus atractivos y novedades al público, sino también potencia estos días su actividad turística a través de reuniones con profesionales en las que participan importantes autoridades del país, turoperadores y otros agentes del sector.
Ahmed Yousef, presidente de la Autoridad Egipcia de Turismo, señaló a España como uno de los principales mercados de emisión de turistas. “FITUR brinda una excelente oportunidad para impulsar nuestro fascinante patrimonio cultural y acercarlo a los españoles a través de nuevas conexiones, servicios y propuestas. Cerramos 2019 con más de 12 millones de turistas, suma que esperamos superar en 2020 alcanzando los 15 millones”.
Una de las principales atracciones que verá la luz este año es el Gran Museo Egipcio, un colosal proyecto que se convertirá en la muestra más grande del mundo dedicada a una sola civilización. “No cabe duda de que la inauguración del Gran Museo Egipcio marcará un antes y un después en la forma de divulgar nuestra herencia cultural. En él se mostrarán más de 45.000 piezas de arte del Antiguo Egipto, de las cuales más de 20.000 no han sido nunca expuestas”, sintetiza Yousef.
Además de las conocidas Pirámides de Guiza o de los majestuosos templos a orillas del Nilo, el país de los faraones expondrá en FITUR otras interesantes propuestas menos conocidas a los visitantes que busquen durante el fin de semana de la feria inspiración para sus próximos viajes. Por ejemplo, la Ruta de la Sagrada Familia suscita un gran interés para el turismo cultural, con enclaves como las iglesias de San Sergio y de la Virgen, situadas en el barrio copto de El Cairo. Las bulliciosas calles de la capital egipcia son el legado de milenios de historia, desde el Viejo Cairo al Cairo Islámico, regalando entretenimiento por doquier.
Los enclaves del Mar Rojo ofrecen una propuesta de ocio más allá del turismo de sol y de playa. Esta zona costera destaca por ser uno de los principales destinos submarinistas del mundo, tanto para aquellos que quieran iniciarse en este deporte como para los que son expertos en él. Dos de sus “perlas” son los restos del Thistlegorm, un buque británico hundido durante la Segunda Guerra Mundial, y el Parque Nacional de Ras Mohammed. Las mejores y más populares zonas para descansar tras una jornada de inmersión son Sharm el-Sheikh, Hurgada y El-Gouna, donde el viajero encontrará todo tipo de comodidades y una moderna planta hotelera.
Otra llamativa propuesta es conocer el país a través de sus oasis. El Fayorum es una excelente opción para aquellos que viajan a El Cairo, mientras Fafafra –cercano al Desierto Blanco-, Dakhla –conocido como el “oasis rosa”-, o Siwa –un espejismo esmeralda tras 300 kilómetros de desierto- bien merecen una visita más detenida.