El centenario Hotel Alhambra Palace de Granada, que ha alojado a reyes, mandatarios y estrellas de Hollywood, ha obtenido su quinta estrella tras renovar su oferta, que a partir de ahora incluirá también cuatro suites y seis deluxe.
Durante el último año, el establecimiento ha acometido una renovación general de sus habitaciones y baños para adaptarse a la normativa vigente de cinco estrellas.
Considerado el segundo hotel en activo más antiguo de España, fue fundado por el duque de San Pedro de Galatino hace 107 años.
Con los cambios acometidos, el Alhambra Palace pasa a contar con 108 habitaciones más amplias (seis suites, 11 júnior suites y 91 habitaciones clásicas, de las que cuatro están adaptadas para personas con discapacidad y seis son deluxe).
Desde el pasado mes de octubre, cuenta además con cuatro suites desde cuyas terrazas es posible apreciar el bosque de la ciudadela de la Alhambra, donde se ubica, o la vega de Granada.
De inspiración contemporánea y minimalista, este establecimiento hotelero construido a imagen y semejanza del palacio nazarí basa su decoración en celosías neonazaríes.
En rueda de prensa, la directora del Hotel Alhambra Palace, Marianella Bertini, ha manifestado que con el esfuerzo económico de la empresa familiar se ha materializado “un viejo sueño puesto en marcha hace 25 años por los propietarios del establecimiento”.
Por su parte, Ignacio Durán, director de Marketing y Ventas del Hotel Alhambra Palace, ha señalado que “la quinta estrella, junto con su reciente incorporación a la prestigiosa red ‘The Signature Travel Network’, suponen un importante reconocimiento internacional” para este establecimiento.
Desde su inauguración, en sus habitaciones han dormido personajes tan dispares como el Dalai Lama y Lenny Kravitz, Viggo Mortensen y Stephen Hawking, Federico García Lorca y Orson Welles, y Brad Pitt, Henry Fonda, Glenn Ford o Eva Perón.
Por sus salas han pasado casi todos los presidentes de España y otros muchos de Francia, Venezuela, Finlandia o Indonesia, embajadores, príncipes y reyes, el Papa Clemente, Severo Ochoa, el banquero Rockefeller o Harrison Schmitt, el último hombre que pisó la luna con el Apolo 17.
Y junto a los famosos, los clientes anónimos que toman café una tarde cualquiera en las mesas que usaron antes Vargas Llosa o Alberti, Lola Flores o Almodóvar.