En Baleares quedan este viernes menos de 15.000 turistas hospedados en viviendas de alquiler y en los aproximadamente 130 hoteles que permanecen abiertos, que van al ritmo en que sus últimos clientes encuentran vuelos para regresar a sus países.
Fuentes del sector turístico han indicado a Efe que el grueso de los establecimientos abiertos y los turistas que continúan en las islas están en Mallorca, mientras que en Menorca prácticamente no queda ninguno y en Ibiza la presencia de visitantes extranjeros es residual.
La Asociación Hotelera de la Playa de Palma, la zona con más alojamientos turísticos del archipiélago, ha detallado que a día de hoy están en funcionamiento unos 23 hoteles de los que 13 cierran a lo largo de la jornada.
En los 10 restantes, que prevén cesar su actividad durante el fin de semana y el lunes, quedarán alojados unos 300 turistas pendientes de retornar a casa.
Antes de decretarse el estado de alarma, en temporada baja previa al inicio de la campaña de Semana Santa, estaban abiertos 58 hoteles con casi 20.000 plazas disponibles de la Playa de Palma.
La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM), que representa a unos 850 alojamientos turísticos, casi el 90 % de los que existen en la isla, ha señalado que hace una semana había 210 hoteles abiertos, de los que al menos la mitad han ido cerrando paulatinamente según avanzaba la epidemia, en particular tras dictarse el confinamiento con el estado de alarma.
La Conselleria de Turismo ha confirmado, por otra parte, que los 3.000 turistas del Imserso que se encontraban en el archipiélago antes del inicio de la crisis ya han regresado a sus residencias de origen.
El aeropuerto de Palma tenía previstos para este viernes 35 vuelos internacionales, aunque fuentes de AENA han indicado que las compañías modifican constantemente sus operaciones y esa cifra podría variar. EFE