El presidente del Gremio de Hoteles de Barcelona, Jordi Clos, ha alertado hoy de la pérdida de reputación internacional que sufre Barcelona y ha pedido que se gestione mejor la ciudad para acabar con problemas que sufre como la inseguridad, el incivismo, el “top manta” y otras actividades ilegales.
En rueda de prensa, Clos ha destacado la pérdida de posiciones que ha sufrido la capital catalana entre las ciudades mejor valoradas del mundo, tal como refleja el informe anual City Rep Track, donde Barcelona ha pasado del octavo al decimoquinto lugar.
Ha mencionado varios indicadores que avisan de que algo pasa en la ciudad, como los artículos aparecidos en algunos medios de comunicación internacionales que mencionan los conflictos con la actividad turística y los problemas que causan las manifestaciones que se celebran en la ciudad, lo que da una imagen “exageradamente negativa”.
En el marco de la actuación municipal, ha explicado varias cosas que están afectando a esta reputación, como el posicionamiento negativo del consistorio hacia la actividad turística de la ciudad, el incremento de la inseguridad, con bandas que vienen a robar a los turistas, o el crecimiento de la prostitución.
También ha destacado la proliferación de actividades ilegales, “la epidemia del ‘top manta'”, la venta de todo tipo de productos en las playas de la ciudad, el aumento de actitudes incívicas en la calle o la falta de limpieza en algunos espacios públicos, al tiempo que ha denunciado que la gente pueda acampar en los parques o pasear en bañador o en biquini por la ciudad.
“Tampoco ayuda la situación política”, ha dicho Clos, que ha añadido otros problemas como las huelgas del aeropuerto, los atentados de hace un año o la reciente huelga de taxis.
Ha pedido que se gestione bien la ciudad para “erradicar” el incivismo y la inseguridad.
Clos ha afirmado que antes del verano se reunió con la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y con la consellera de Empresa, Àngels Chacón, para explicarles sus temores y ambas le dijeron que el problema era de la otra institución, por lo que les ha pedido que se tomen estos problemas en serio.
Para el presidente de los hoteleros barceloneses, ahora más que nunca el 100 % del impuesto de la tasa turística debería dedicarse a relanzar la marca Barcelona y solucionar estos problemas porque “si Barcelona se constipa, Cataluña puede coger una pulmonía”.