El alquiler por horas y no la reserva completa de una habitación es la estrategia adoptada por hoteles de Latinoamérica en una batalla contra la proliferación de casas y apartamentos de uso turístico, aseguró a Efe el directivo de la starup española de reservas “ByHours”, Guillermo Gaspart.
El fenómeno de portales de alquiler de viviendas de uso turístico o vacacional, como Airbnb, crece de forma exponencial por su coste accesible, causando estragos en los ingresos que deben percibir la industria hotelera, precisó en una entrevista Gaspart, emprendedor que proviene del imperio barcelonés Husa Hoteles.
Cofundador y presidente actual de la aplicación “ByHours”, que da la opción de alquilar paquetes de 3, 6, y 12 horas de un cuarto y el uso de las instalaciones de un hotel, contó que es el momento de que la industria legal se anime a usar el sistema para poder ganar terreno ante los alquileres en negro que hacen poco favor al negocio.
Desde el 2012, junto al creador y máximo ejecutivo de la starup, Cristian Rodríguez, dieron con la respuesta a la pregunta ¿Por qué la estancia mínima de un hotel es un día y por qué no por horas?: una herramienta rentable para aquellos cuartos que los hoteles no podían vender y una opción para los clientes.
“Para desgracia en ciertos países, el sector hotelero no está al 100 por ciento de su ocupación, para aquellos que tienen unas 300 habitaciones tienen un promedio 45 cuartos por día que no logran ser reservados, y como no pueden bajar el precio, la única opción es que ofrezcan al mercado un producto nuevo”, especificó el barcelonés.
Ante esa realidad, Gaspart y Rodríguez realizaron un estudio de mercado en España, que reveló que existía una necesidad de personas que requerían de espacios para descansar, divertirse o trabajar y que éstas debían quedarse un largo tiempo en aeropuertos, hospitales y otros sitios de una urbe capitalina.
“El concepto choca, lo primero que se piensa de esta aplicación es que es usada para reservar habitaciones para tener sexo, pero es todo lo contrario; las personas necesitan de un lugar para descansar o hacer actividades recreativas”, declaró.
ByHours tampoco tiene “nada con portales como Airbnb, más bien está se puede considerar la verdadera amenaza y competencia del sector hotelero, lo que no vamos hacer es entrar en ese tipo de producto de alquileres de pisos turísticos”, sentenció el español.
“Dudo que Airnb pueda competir con la microestancia, no creo que un apartamento se pueda alquilar por tres horas, no tienen recepción; al final no están preparados”, declaró Gaspart.
Según datos de Airbnb, hasta mayo pasado aumentó un 148 por ciento el número de llegadas a viviendas inscritas en la región, hasta llegar a 5,2 millones de personas, y se duplicó la cantidad pagada por el alojamiento, hasta totalizar 650 millones de dólares.
HomeAway, Wimdu o Niumba son otras de las opciones de plataformas que no están reguladas por el pago de impuestos y legislaciones en algunos de los países en que funcionan, en la que el sector hotelero a nivel mundial ha declarado su rechazo por competencia desleal.
Gaspart señaló que el compromiso es captar y ser socios de hoteles de Latinoamérica para dar empuje a esa industria con la incorporación de servicios que innoven y atraigan a futuros visitantes.
Un informe de la consultora CBRE Hoteles expone que en la región hay cerca de 2,5 millones de habitaciones y en 2017 se incorporaron unas 20.000 nuevos cuartos de categoría turística distribuidos en 71 hoteles.
El portavoz citó también el rendimiento económico que supuso el uso de ByHours en hoteles de España y Alemania, generando más de 280.000 dólares al año, un ingreso complementario que se suma al del alquiler típico de las habitaciones por jornada completa.
“Un usuario puede ahorrar hasta un 60 por ciento de la tarifa oficial de la habitación; el éxito ha sido tal que hemos vendido más de 1 millón de horas y tenemos más de 200.000 clientes únicos en los diferentes alojamientos del mundo que opera ByHours”, afirmó.
Con un portafolio de 2.700 hoteles de alquiler por hora, en la región latinoamericana cuentan con más de 600 sitios ubicados en Argentina, Colombia, Ecuador, Chile, México y Panamá, y próximamente en Brasil y Costa Rica. Además operan en Alemania, Catar, España, Francia, e Italia, entre otros.