Indonesia de isla en isla
El gigantesco archipiélago indonesio está formado por más de 17.500 islas que albergan a 250 millones de habitantes, cerca de 700 lenguas diferentes y centenares de religiones y tradiciones ancestrales. Estas características convierten a Indonesia en uno de los países con mayor variedad cultural del mundo transportando al viajero a universos diferentes, mientras salta de isla en isla.
La isla de Bali o las islas Gili son destinos turísticos que atraen cada año a miles de viajeros hasta este rincón del sudeste asiático. Playas de agua cristalina, arena blanca y mucho surf son los ingredientes perfectos para los que quieren disfrutar de unas vacaciones de sol y playa.
Las islas Gili son un archipiélago de tres pequeñas islas situadas en la costa noroeste de Lombok. Es un destino muy común para aquellos viajeros que quieran conocer alguna isla accesible desde Bali. Ahora bien, cada Gili tiene sus peculiaridades, así que tienes que saber bien qué estás buscando para poder elegir.
Gili Air
El ritmo en Indonesia es pausado en general, pero en Gili Air especialmente. No hay coches, ni motos… la prisa no existe… Ésta es la sensación que sientes cuando vas llegando al puerto de Gili Air y ves que sólo hay coloridos carros de caballos esperando para desplazar a turistas y locales a cualquier punto de la isla.
En Gili Air están prohibidos los vehículos motorizados, de ahí que el transporte más utilizado sean los carros de caballos (cidomos) y las bicicletas. Esto aporta un encanto especial a esta pequeña isla, que también se puede recorrer a pie por sus caminos de tierra rodeados de palmeras.
Las playas no son de arena, estás formadas por los arrecifes de coral desgastados, por lo que no es cómodo tumbarse, pero puedes hacerlo cómodamente consumiendo alguna bebida en cualquiera de los restaurantes que hay en primera línea de playa. Se recomienda llevar calzado adecuado para poder moverte cómodamente por la playa.
Lo más impresionante de Gili air es el color azul turquesa del agua. La riqueza del fondo submarino a pie de playa es lo que más nos llamó la atención de esta isla. Se puede practicar buen snorkel, aunque su fondo sea el que más deteriorado de las islas Gili.
A pesar de la gran cantidad de alojamientos y restaurantes, no da la sensación de estar llena de turistas. Es una pequeña isla, muy tranquila y, bastante auténtica, sobre todo en su interior, donde te puedes perder entre caminos de tierra y palmeras por los que sólo pasan carros de caballo y bicicletas.
A partir de las 17.00 todo gira en torno al atardecer. La zona norte de la isla se convierte en la más concurrida, ya que es desde donde el sol se esconde tras el monte Gatung de la isla de Bali.
Gili Trawangan
La más grande de las islas Gili ha conseguido la fama de isla fiestera a la que se dirigen jóvenes de todo el mundo atraídos por su ambiente. No obstante, si te alejas de la calle principal, que es donde llegan todos los barcos, en Gili Trawangan también puedes encontrar un ambiente tranquilo y auténtico.
Con el alojamiento ocurre lo mismo, solo tienes que adentrarte andando 10 minutos hacía el interior de la isla desde el puerto, para conseguir algún bungalow a la mitad de precio de los que están en la calle principal con las mismas características, incluyendo desayuno y aire acondicionado.
Aunque hace unos años no se veía ningún vehículo motorizado por la isla, ya empieza a ser muy común el uso de motocicletas eléctricas. No obstante, al ser una isla muy plana, la mejor forma de disfrutarla es alquilar una bicicleta en tu alojamiento o en alguna de las tiendas de la calle principal. Cuesta 40.000 rupias (2,5€) al día y te da la libertad de poder recorrer toda la isla por tu cuenta. En 2 horas se bordea la isla completa, es un paseo fácil en general que sólo se complica en algunas zonas porque no hay camino y hay que pedalear por la arena, pero no llega a 5 minutos.
Una vez que tengas la bici, solo te falta el equipo de gafas y tubo para bucear. Si no te lo llevas de casa, no te preocupes, se puede alquilar por horas o por día completo en cualquier chiringuito de la playa.
Probablemente en Gili Trawangan disfrutarán de la mejor jornada de snorkel de las islas Gili, ya que desde la misma orilla ya puedes divisar enormes tortugas que van nadando muy cerca de la orilla, así que no te podrás resistir a pasarte horas nadando en estas aguas turquesas con fondos de arrecifes de coral.
Por la noche no puedes dejar de ir a cenar al Night Market de la entrada de la isla. Es un espectáculo de pescado fresco, marisco del día y platos típicos indonesios recién cocinados. Suele estar bastante lleno, con lo que hay que ir sin prisa, pero vale la pena hacer un poco de cola para conseguir un hueco en las mesas que montan en la misma plaza al aire libre.
Al caer el sol, la isla se transforma, lo que por la mañana es una isla tranquila de playas apacibles, durante la noche todo es música, neones y mucho alcohol. Es la isla más visitada por la juventud que llega en busca de fiesta en un lugar paradisiaco.
Gili Meno
Al ser la isla menos explotada, los precios de los alojamientos son algo más caros que en las otras dos islas Gili. Es el destino elegido por la mayoría de turistas que van de luna de miel, por lo que el ambiente va muy en esta línea… isla romántica, con infraestructura orientada principalmente a un turismo de nivel adquisitivo más elevado.
Dos kilómetros de largo por uno de ancho de isla que tendrás casi a tu disposición, ya que es la isla menos visitada y las playas suelen estar vacías casi todo el día. En la zona izquierda de la isla es donde se detienen todos los barcos y se concentran la mayoría de alojamientos y restaurantes, pero saliendo de aquí, tendrás un paraíso a tu disposición.
Eso sí, hay que tener en cuenta que para bañarse en la playa, hay que hacerlo con calzado adecuado para evitar accidentes.
Si visitas Gili Meno tienes que tener mucho cuidado con los mosquitos. La isla tiene un pequeño lago en su interior y esto hace que esté literalmente plagada de mosquitos.
Se puede llegar desde Gili Air o Trawangan en ferry local por 25.000 rupias (1,5€) o en lancha rápida por 100.000 rupias (6,5€).
De antemano debes saber que las mejores playas de la provincia de Bali no se encuentran en la conocida como isla de los Dioses, sino en las islas Nusa, que también pertenecen a esta provincia. Al sureste de la isla de Bali se encuentran Nusa Penida, Nusa Lembongan y Nusa Ceningan.
Nusa Lembongan
Se puede acceder en ferry desde el puerto de Sanur en Bali en un trayecto de 30 minutos aproximadamente.
Nada más llegar te darás cuenta de que es una isla mucho menos turística y más tranquila y modesta que Bali. Es ideal para pasar unos días de relax en sus playas, entre las que destaca Mushroom Bay y Dream Beach, con un columpio en su parte superior que es de lo más fotografiado de la isla. Cerca de aquí se encuentran las Lágrimas del Diablo, una zona de imponentes acantilados, ideal para visitar al caer el sol.
Desde Nusa Lembongan se puede ir en barco público a Nusa Penida, pero en función de la temporada, la frecuencia puede ser casi nula, en este caso te verás obligado a hablar con algún barquero para que te lleve de forma privada.
Nusa Penida
Necesitarás mínimo un día completo para recorrer esta isla que se está convirtiendo en la más famosa de las Nusa debido a sus paisajes increíbles. Es la más grande de las tres y la menos turística, así que su oferta hotelera es limitada.
Al llegar al puerto de Toyapakeh, los locales son bastante insistentes para ofrecerte un tour guiado. Puede ser una buena opción ya que ellos saben bien cómo llegar a los puntos turísticos, cuándo hay menos turistas, te ayudarán a bajar a algunos acantilados inaccesibles… pero también hay que decir, que se puede hacer por tu cuenta alquilando una moto y preguntando a los locales que encontrarás en el camino.
Si decides visitar Nusa Penisa no te puedes perder:
- Crystal Bay: Una playa tranquila, ideal para hacer snorkel ya que no hay muchas corrientes.
- Kelingking Beach (secret point): Una zona de acantilado con unas vistas de ensueño. Probablemente el punto más fotografiado de Nusa Penida. Si tienes vértigo, estarás limitado, pero si no, puedes bajar a la playa con mucho cuidado.
- Piscinas naturales de Ángel Billabong a las que podrás bajar si llevas calzado adecuado y la marea te lo permite. Y las vistas de Broken Beach, un arco natural de piedra que contrasta con el turquesa del fondo marino.
- Y si te gusta el buceo, no puedes perderte el Manta Point donde podrás ver de cerca enormes mantarrayas.
Pero no todas las islas de indonesia son iguales. Trekkings por volcanes activos como el Bromo y visitas a inmensos complejos de templos como Borobudur son los principales atractivos de la isla de Java. Para aquellos viajeros amantes del buceo, Indonesia ofrece algunos de los mejores arrecifes de coral del planeta en los que es posible encontrar especies de peces únicas en el mundo. El parque nacional marino de Bunaken es el destino preferido para disfrutar de la vida bajo el agua tanto si haces inversiones como si buscas el snorkel más alucinante de tu vida. Si te gusta la aventura, no te puedes perder la isla de Sumatra y sus trekkings por la selva. Uno de los pocos lugares del mundo en los que aún es posible encontrar orangutanes en libertad.
La isla de Komodo es también conocida por su habitante más característico, el dragón de Komodo, una especie de varano que puede llegar a pesar 70 kg y medir 3 metros. Este lagarto llegó para quedarse hace 4 millones de años y parece que le ha gustado. Las visitas en barco a la isla de Komodo son fáciles de encontrar tanto desde la Isla de Bali como desde las Gili. Se pueden hacer en barcos rápidos o en pequeños mini cruceros de varios días que llegan hasta la isla haciendo paradas en lugares increíbles para bañarse o hacer snorkel.
Pero sin duda, algunos de los secretos más escondidos de Indonesia se encuentran en las lejanas islas Raja Ampat muy cerca de Papúa Occidental. Este remoto parque natural es poco accesible y, a día de hoy, sigue sin tener una infraestructura que permita al turista organizar sus viajes con comodidad. Ésta precisamente es la característica que mantiene virgen este paraíso, aunque empiezan a aparecer algunos operadores turísticos que ofrecen pequeños cruceros en velero alrededor de estas islas a un precio no apto para todos los bolsillos.
En el extremo más oriental del archipiélago indonesio se encuentra Papúa Nueva Guinea uno de los rincones más remotos del planeta al que pocos llegan y cuyas selvas siguen siendo, a día de hoy, el último refugio para gran cantidad de tribus aisladas.
A tener en cuenta en las islas de Indonesia:
- En la mayoría de alojamientos de presupuesto medio, el agua de las duchas es agua salada.
- En las islas no abundan los cajeros y, además, nunca se sabe cuándo dejarán de funcionar, así que es muy recomendable llevar dinero en efectivo.
- Intenta siempre comprar los billetes para ferries públicos (en lugar de lanchas privadas) en los puertos de cada isla. En el alojamiento siempre te van a decir que es el mismo precio y que puedes quedarte sin billete, pero en el puerto siempre son más baratos, ya que evitas la comisión del alojamiento.
- Lleva funda impermeable para la mochila, ya que muchos barcos te recogen en la misma orilla de la playa y, si hay algo de oleaje, es muy probable que se te moje todo. En estos barcos, la tripulación suele bajar para ayudarte a subir y pasan una cesta en la que tienes que dejar las chanclas antes de acceder al barco.
Alejandra Chito, es periodista y un día decidió que quería comunicar de una manera diferente: a través de sus viajes. Una pasión que la convirtió en una nómada aventurera que ya ha recorrido numerosos puntos del planeta. Esta malagueña inquieta está especializada en viajes ‘low cost’ y a través de sus experiencias el viajero descubre como sacar lo máximo de un destino.