Israel cierra hoy la Feria Internacional de Turismo Mediterráneo (IMTM, en sus siglas en inglés), que durante dos días ha atraído a promotores turísticos de todo el mundo, incluidas varias entidades españolas que buscan afianzar este sector con el país.
“Un lugar de encuentro y de creación de tendencias para la industria turística local y global”, es como los organizadores conciben la feria anual que en esta ocasión cumplió su 25 edición con la presencia de más de 360 operadores de Francia, Portugal, Filipinas, Macedonia, Rumanía, Grecia, Brasil, Chile, Ecuador, Tanzania o Zanzibar, entre muchos otros.
España contó con varios representantes en la que es considerada la mayor feria profesional de turismo al otro lado del Mediterráneo, como la aerolínea Air Europa, la agencia nacional encargada de promocionar España en el exterior, Turespaña, promotores del Gobierno aragonés, de las juntas de turismo de País Vasco, Cataluña, Costa del Sol-Málaga, Gran Canaria y Tenerife, recoge la web del evento.
La organización destaca que “per cápita, el israelí viaja más al extranjero que cualquier otra nación del mundo. Los israelíes realizan cuatro millones de viajes de alto presupuesto al año, con una estancia media de entre 4-10 días; un púbico viajero siempre sediento tanto de destinos exóticos como clásicos”, lo que incentiva la participación en este escaparate turístico.
Aunque aún es “un mercado pequeñito” para destinos incipientes como Tenerife, apunta a Efe Alberto Bernabé, consejero de Turismo y Acción Exterior del Cabildo en la isla, más de 10.000 israelíes la visitaron entre marzo y diciembre de 2018, la “cifra más alta” desde que comenzaron a trabajar en sus relaciones bilaterales hace una década.
Ésta coincide con el establecimiento de un vuelo semanal directo desde Tel Aviv operado por Israel, que Bernabé espera que genere “una mezcla explosiva” junto a la “climatología beneficiosa, estar en medio del Atlántico, un ocio variado de sol, playa, montaña, golf, lujo, deporte en la naturaleza, gastronomía y algo que interesa al israelí, el comercio; el ‘shopping'”.
En competencia con otros lugares tan afianzados entre los israelíes en España como Madrid o Barcelona, también hay retos, señala el consejero, que encabeza una delegación tinerfeña centrada en impulsar las relaciones entre ambas partes y explorar opciones de colaboración con empresas emergentes del sector.
“Al ser tan poco conocido hay que empezar desde cero: dónde estás, idioma, clima… Cosas que no hay que dar por hecho”, abunda Bernabé y señala que son algunas de las diferencias con otros mercados, como el británico, que con unos dos millones de desplazamientos a la isla al año, no necesita de esas explicaciones.
Israel, por su parte, también trabaja en afianzar y ampliar sus vínculos turísticos con España, que se encuentra entre los diez países que más han aumentado sus visitas en 2018 tras campañas de promoción desde el Ministerio de Turismo.