La compañía francesa Aigle Azur anunció este jueves que suspende todos sus vuelos a partir de hoy por la noche mientras espera la presentación de ofertas de compra dentro del procedimiento del concurso de acreedores.
“La situación financiera de la compañía y las dificultades operaciones (…) no permiten asegurar los vuelos más allá del 6 de septiembre por la noche”, explicó la aerolínea en un comunicado interno dirigido a sus 1.150 empleados y difundido por los medios franceses.
Las dos administradoras de la compañía, que fue colocada bajo administración judicial el pasado lunes, señalan en su comunicación que la búsqueda de compradores de la aerolínea prosigue y que “se han recibido ya señales de interés”, según el diario “Le Figaro”.
También aseguran que los salarios seguirán siendo pagados en su integridad y que los aparatos quedarán estacionados en espera de ser reposicionados los próximos días.
Además, Aigle Azur precisa que su situación financiera “no permita garantizar una indemnización” para aquellos clientes que se vean perjudicados por la suspensión de sus vuelos.
Previamente, la aerolínea había indicado en un comunicado que cancelaba a partir de este jueves todos los vuelos regulares con salida o llegada a Mali, Brasil, Portugal y Ucrania.
La aerolínea se disculpó ante sus pasajeros y sus socios “ante esta situación excepcional” que se debe a que se encuentra bajo administración judicial desde el pasado lunes, a la búsqueda de compradores.
Los posibles candidatos tienen hasta el lunes 9 a las 12.00 locales (10.00 GMT) para formalizar sus ofertas ante el administrador designado por el Tribunal de Comercio de la ciudad de Evry, en las afueras de París.
Según “Le Figaro”, hay al menos tres compañías que tienen intención de hacerlo: las francesas Air France y Air Caraïbes, y la española Vueling. En los tres casos son ofertas parciales.
Precisamente, Vueling había establecido en agosto un principio de acuerdo con la dirección de Aigle Azur que había antes de que se declarara en concurso de acreedores para comprarle sus líneas entre París y Portugal.
Ese pacto ha dejado de tener validez con la nueva situación de la aerolínea francesa.
Para la filial española de IAG, el interés de esa operación era, sobre todo, recuperar derechos de despegue y aterrizaje del aeropuerto parisino de Orly, en el que tiene una de sus principales bases.
La razón es que hay muy pocas posibilidades de crecer en Orly porque el número de operaciones está fuertemente limitado por la saturación de las pistas y el cierre nocturno obligatorio.
Aigle Azur cuenta con una plantilla de unos 1.150 empleados, nació en 1946 y el centro de su negocio son las líneas entre Francia y Argelia.
