Representantes de diferentes gobiernos e instituciones han reconocido este jueves, en la vigésimo tercera asamblea general de la Organización Mundial del Turismo (OMT), que el empleo en el sector turístico está poco valorado frente a otras profesiones.
La jefa de la Agencia Federal de Turismo de Rusia, Zarina Doguzova, ha señalado que los puestos de trabajo en turismo tienen que ser suficientemente atractivos para atraer a los jóvenes en un momento en que su país los necesita para relanzar su industria de viajes.
En la misma línea se ha manifestado la ministra de Industria, Comercio y Turismo en funciones, Reyes Maroto, que ha dicho que, en España, hay “mucho abuso” en la contratación en turismo, además de una elevada temporalidad.
A su juicio, “mejorar la capacitación profesional y retener y atraer talento son claves para mantener la competitividad y el liderazgo de España en el sector turístico mundial”.
Para el vicepresidente ejecutivo de IE University, Diego de Alcázar, la nueva era digital obliga a forjar un nuevo contrato social.
Las empresas tienen que apostar cada vez más por la innovación, el sector público debe conocer los avances tecnológicos para mejorar la gobernanza y la sociedad también tiene que asumir su responsabilidad (por ejemplo los taxistas tienen que reciclarse para ser competitivos frente a nuevas empresas como Uber).
En su opinión, la educación es fundamental, ya que ninguna sociedad ha registrado un avance que no estuviera vinculado a la mejora del contrato social y de la formación.
El nuevo modelo que se necesita hoy debe incorporar la innovación y tener como elemento transversal la educación en humanidades, que nos ayudará a conservar los valores en un mundo cada vez más tecnológico.
Maroto ha detallado que España ha aprovechado la posición y el desarrollo del país con relación al internet y a la fibra, para incorporarlo dentro del modelo de turismo.
“Trabajamos en nuevas metodologías para aprovechar la inteligencia turística”, ha añadido Maroto, que ve la robotización y la digitalización como una oportunidad que, en España, “hemos sabido aprovechar, desarrollando lo que llamamos destinos turísticos inteligentes”, proyecto del que ya forma parte una red a nivel local de más de 60 municipios.
España está utilizando el turismo también como palanca para hacer frente al reto demográfico, donde la tecnología es clave, ya que permite el desarrollo de nuevos productos, la gestión del destino y su visibilización (lo que no se conoce, no se va a ver).
La capacitación de la mano de obra es clave en un país como España, donde hay casi un 14 % de la población vinculada al sector turístico, por lo que se debe adaptar la educación, para que ese capital humano pueda aprovechar lo que va a ser el turismo digital y la digitalización como palanca para generar oportunidades, ha insistido.
La educación y la política turística son claves porque “necesitamos buenos profesionales y capacidades para aprovechar no solo la digitalización, sino también para poder competir y diferenciarnos de otros destinos que pueden tener una singularidad o una similitud en cuanto al producto, pero nosotros lo tenemos que ofrecer de otra manera”, ha agregado.
Además, la OMT y el grupo turístico español Globalia han anunciado el lanzamiento de la segunda edición del concurso global de ‘start-ups’ de turismo, que cuenta en esta ocasión con el respaldo de socios como Telefónica, Amadeus, Intu y Distrito Digital Valencia.
Las propuestas comenzarán a llegar el 13 de septiembre a Wakalua, el centro de innovación turística de Globalia, y los ganadores serán anunciados el 21 de enero de 2020 durante la Feria Internacional de Turismo de Madrid (Fitur).
Con esta iniciativa, que en su primera edición atrajo 3.000 aplicaciones de todo el mundo, exploramos “nuevos terrenos en turismo, innovación, emprendimiento y desarrollo sostenible”, ha apuntado el secretario general de la OMT, Zurab Pololikashvili