Si eres de esos a los que les horroriza el cloro y las piscinas atestadas de gente, permanece atento a este artículo donde os vamos a enseñar algunas de las mejores piscinas naturales de España. Las tenemos de agua dulce y de agua salada, al gusto del consumidor. Eso sí, en ningún caso tiraremos de químicos y te darás un baño rodeado de paraísos naturales y entornos no muy concurridos.
Hablamos de las mejores piscinas naturales creadas por el azar, el paso de los años y unas condiciones naturales muy específicas de cada paraje. Un regalo de la madre naturaleza ideal para estas fechas en las que el calor aprieta.
Ya sea en la península o en las islas, si vives en España no tienes que irte muy lejos para disfrutar de las mejores piscinas naturales donde darte un buen chapuzón.
Las tenemos en ríos, márgenes de los propios ríos, espacios estancos donde penetra el agua del mar, manantiales que brotan del subsuelo y un largo etcétera.
En estos parajes la intervención del hombre se limita a acondicionar un poco la zona con pasarelas, escaleras o algún trampolín. Se tratan de sitios auténticos, no muy conocidos y, en ocasiones, con accesos algo complicados. Eso sí, la recompensa lo merece…
Piscina natural de Beceite
Comenzamos nuestro recorrido por la provincia aragonesa de Teruel., en el maravillosos paisaje de los Puertos de Beceite, en la comarca de Maestrazgo.
Pozas y piscinas naturales de agua dulce esperan a aquellos viajeros que antes se aventuren por la ruta natural del Parrisal. Todo este paisaje es gracias a la acción del rio Matarraña en un entorno muy bien señalizado y accesible desde la localidad de Pla de la Mina.
El Caletón en Garachico
Cogemos el avión para desplazarnos hasta Tenerife, en las Islas Canarias, un lugar con bastantes piscinas naturales al servicio de sus habitantes y visitantes.
El Caletón es una de estas piscinas naturales que se encuentra en el término municipal de Garachico. Su extraordinaria forma, frente al océano, se debe a la lava solidificada de una erupción del volcán Trevejo a comienzos del siglo XVIII.
Garganta de los infiernos
De vuelta a la península, nos detenemos en la provincia extremeña de Cáceres. Para más señas en el paisaje de cerezos en flor del Valle del Jerte.
Se trata de un lugar de gran interés para los amantes del senderismo. Se encuentra en la Reserva Natural Gargata de los Inviernos y consta de diferentes saltos de agua, cascadas y 13 piscinas naturales. El causante, la erosión de los ríos en la piedra granítica.
Los Charcones
Este es uno de esos sitios poco accesibles donde la aventura precederá al baño. De nuevo nos desplazamos a las Islas Canarias, esta vez a Lanzarote.
Esta piscina natural se encuentra junto a unas ruinas abandonadas de un hotel de los años 40 que jamás llegó a abrir sus puertas. Las diferentes piscinas que se van rellenando con las aguas cristalinas del Atlántico en un lugar que ha permanecido prácticamente virgen durante el paso de los años.
La Font Calda
Esta vez nos centramos en la comunidad autónoma catalana, en la provincia de Tarragona, concretamente en la localidad de Gandesa.
Aquí podemos encontrar una piscina de aguas medicinales que brota de la tierra a 28 grados centígrados, al abrazo del río Canaletes. Desde el siglo XIV se han datado las propiedades de estas aguas ricas en sulfato magnésico, cloruro sódico y carbonato cálcico.
Gulpiyuri
Este lugar, situado en Asturias, es una de las mejores piscinas naturales de toda España. Hablamos de una playa sin mar, de un lugar de una enorme belleza muy difícil de describir. La posibilidad de poder bañarse depende de las cambiantes mareas.
El agua penetra en la piscina a través de un intrincado conjunto de cuevas subterráneas, por lo que es conveniente informarse de su estado antes de ir a visitarla.
Fuente de Algar
Nos vamos a la Comunidad Valenciana, a la provincia de Alicante, a tan solo 15 kilómetros de Benidorm, en concreto a la localidad de Callosa d´en Sarría.
Esta es quizás la piscina natural más concurrida de todas las que vamos a nombrar en este artículo. En verano es aconsejable visitarla de lunes a viernes, evitando los fines de semana.
Su gran fama viene motivada por sus cascadas y tolls, o remansos de agua, en tonos turquesas. Bañarse en este entorno es el colofón a las múltiples rutas medioambientales que oferta la zona.
El Charco Azul
Volvemos de nuevo a las Canarias, esta vez a la isla del Hierro, en el municipio de La Frontera. Frente a la inmensidad del océano encontramos dos pequeñas piscinas naturales. A una de ella se accede mediante una pequeña cueva, lo que dota al lugar de mucho mayor encanto.
Pou Clar d´Ontinyent
Para terminar viajamos a Valencia, en el municipio de Ontivent, donde se encuentran las mejores piscinas naturales de Pou Clar. Un lugar de gran belleza natural gracias a la actividad y erosión del rio Clariano.
Se trata de varios pozos y cada uno tiene su nombre particular. El lugar está habilitado con un aparcamiento, así como varios equipamientos municipales que lo hacen muy recomendable para su uso en familia.