Las autoridades peruanas limitarán el acceso de turistas a tres sectores de la ciudadela inca de Machu Picchu como parte de una prueba piloto para asegurar la conservación de los puntos más delicados de sus ruinas.
La Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC) de Cusco, la región del sur de Perú donde se encuentra Machu Picchu, anunció este miércoles en un comunicado que los puntos donde restringirá el ingreso de turistas son el templo del sol, el templo del cóndor y la pirámide del intiwatana.
La prueba piloto se llevará a cabo entre el 15 y 28 de mayo con el objetivo de adoptar medidas que se aplicarán a partir del 1 de junio.
Del 15 al 21 de mayo, los visitantes solo podrán acceder al templo del sol entre las 7:00 y 10:00, al templo del cóndor entre las 10:00 y 13:00, y a la pirámide del intiwatana de las 13:00 a las 16:00.
Del 22 al 28 de mayo los horarios se invertirán, y en el primer segmento solo será accesible la pirámide del intiwatana y en el último el templo del sol.
La DDC señaló que esta prueba es “por razones estrictas de conservación y uso sostenible de los principales conjuntos arquitectónicos” que integran Machu Picchu frente a la gran demanda turística.
El promedio diario de visitantes a Machu Picchu ronda los 4.000, lo que hace unos años provocó que la Unesco evaluara si incluía a la principal atracción turística de Perú en su lista de patrimonio de la humanidad en riesgo.
Recientemente el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo encargó una serie de estudios sobre alternativas para facilitar el tránsito de turistas por Machu Picchu, entre ellas un teleférico o un sistema de túneles y ascensores que deben ser evaluadas por Unidad de Gestión de Machu Picchu.
La ciudadela inca de Machu Picchu es reconocida desde 1983 como patrimonio cultural de la humanidad por la Unesco, y desde 2007 es considerada una de las nuevas siete maravillas del mundo