Sudáfrica. Un nombre que nos trae a la mente tradiciones, leyendas y una forma de vida auténtica y en contacto con la madre naturaleza. Su clima, sus gentes, playas y paisajes son todo un tesoro por descubrir que no ha sido siempre suficientemente valorado. Los safaris, deportes de riesgo y avistamiento de animales son actividades muy comunes en este país. Se trata además de un destino apropiado para las familias gracias a su buena relación calidad precio. Viajar por Sudáfrica es darnos cuenta de la diversidad del mundo y olvidar por completo nuestro día a día.
Veamos qué lugares no puedes dejar de visitar si visitas el país.
Podemos comenzar por Johannesburgo, punto de entrada a África Meridional y cuya riqueza cultural es impresionante. Cuenta con más de 40 galerías de arte y mútiples teatros además de una animada vida nocturna gracias a sus múltiples clubs y pubs. Se trata del centro económico del país y supone un punto de partida interesante.
Otro de los puntos con mayor atractivo es Ciudad del Cabo famosa por sus rutas de vino ya que la mayoría de los viñedos se encuentran en la cuenca del río Boland, uno 80 kilómetros al noroeste de la ciudad. Variedades como el Shiraz, el Pinot Noir o el Shiraz encuentran en estos valles fluviales su origen ideal. Merece la pena también ver un ritual diario curioso de la zona, se trata del Indian Runner Ducks que utiliza más de un millar de patos para controlar las plagas de los viñedos.
Por su parte, la ciudad en sí misma es la más antigua de Sudáfrica con más de 300 años, es famosa por sus playas y por el vibrante pueblo Old Biscuit Mill un pueblo vibrante donde se reúnen diseñadores, artistas y fotógrafos en constante innovación. No se debe pasar por alto la zona de The Mill llena de mercados diurnos y nocturnos además de restaurantes y festivales.
La segunda ciudad más grande del país, Durban, está situada en la costa oriental y se trata de un destino muy popular entre los sudafricanos. Es protagonista de eventos internacionales de deporte de primer nivel. Centros comerciales, mercados de artesanía, bazares y una rica gastronomía son otros de sus actractivos. En la comunidad indígena de Durban nació el Bunny Chow un pan relleno de curry y cordero, ternera, pollo o verduras.
A los más aventureros les encantará el Parque Nacional de Kruger que limita con Mozambique y Zimbawe. Tiene una extensión cercana a los dos millones de hectáreas y 16 distintos ecosistemas. Un paseo en safari le garantiza el avistamiento de elefantes, búfalos, leopardos, rinocerontes y leones.
A nivel histórico cobra especial importancia la Isla de Robben en la que estuvo cautivo Nelson Mandela durante 27 años y que cuenta con el mismo número de atracciones turísticas inspiradas en su figura.
La Costa Salvaje es un tesoro virgen natural que puede ser recorrido a pie, caballo o 4×4 a la vez que realizarse expediciones de pesca o buceo. Podrá asistir además El paraje donde tiene lugar la Great Sardine Run, toda una regata sardinera, durante los meses de junio y julio. Se trata de un espectáculo de miles de sardinas que emigran desde Cabo a las aguas más templadas de KwaZulu-Natal para poner sus huevos. Durante el trayecto son seguidas por delfines, ballenas, tiburones, aves y peces de presa.