La aerolínea de bajo coste noruega Norwegian presentó una pérdida neta de 1.454 millones de coronas (150 millones de euros) en 2018, un 19 % menos que el año anterior.
El resultado estuvo influido negativamente por los problemas con los motores de sus aviones Dreamliner, pérdidas en la cobertura de combustible y la dura competencia, señaló en su balance la aerolínea, por la que el grupo de aviación hispano-británico IAG estuvo interesado el año pasado.
La pérdida neta de explotación (ebit) aumentó en cambio un 92 %, hasta 3.851 millones de coronas noruegas (397 millones de euros).
El resultado bruto de explotación (ebitda) presentó una pérdida de 2.183 millones (225 millones de euros), cuando un año atrás había registrado un beneficio de 59 millones (6 millones de euros).
La facturación ascendió a 40.226 millones de coronas (4.153 millones de euros), lo que supone una subida interanual del 30 %.
Norwegian transportó el año pasado a más de 37 millones de pasajeros, un 13 % más; su factor de carga se situó en el 85,8 % y el coste por unidad, excluido el combustible, se redujo un 14 %.
La aerolínea resaltó que se vio forzada a alquilar aviones para evitar retrasos y cancelaciones en sus vuelos intercontinentales, pero que ahora ha cerrado un acuerdo con el fabricante de motores Rolls Royce que tendrá un efecto positivo en 2019.
“Esperamos que los problemas con motores no vuelvan a afectar a los vuelos en adelante. En 2019 el crecimiento y el ritmo de inversiones de Norwegian se reducirán de forma significativa, y se han puesto en marcha una serie de iniciativas para volver a tener un modelo rentable”, escribió la compañía.
En el cuarto trimestre la pérdida neta se multiplicó por cuatro hasta 3.012 millones (311 millones de euros), y también el ebit, con números rojos por 3.593 millones (371 millones de euros).
El ebitda obtuvo también un valor negativo de 3.096 millones (319 millones de euros), casi cinco veces peor que un año antes.
La facturación ascendió a 9.658 millones de coronas (996 millones de euros), lo que supone una subida interanual del 23 %.
Norwegian ha sufrido en las últimas semanas una fuerte caída, de más del 30 %, en la Bolsa de Oslo, coincidiendo con el anuncio de IAG de que descartaba una opa sobre la compañía y de que la propia aerolínea comunicase que captará 3.000 millones de coronas noruegas (308 millones de euros) mediante emisión de acciones