Alrededor de 4.000 pasajeros de varios trenes en el sureste de Francia quedaron ayer bloqueados a causa de un incendio que se declaró ayer en Aubagne, cerca de Marsella, y que obligó a interrumpir el tráfico ferroviario.
La compañía de ferrocarril SNCF indicó en su página internet que los trenes de alta velocidad (TGV) se encuentran “a la espera en las estaciones con total seguridad”, y que la circulación seguía suspendida por “un importante incendio en Aubagne” que afectaba también a una autopista y a varias carreteras.
Los viajeros pasaron la pasada noche en convoyes que se habían quedado inmovilizados en las estaciones de Marsella, Tolón y Niza.
La Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF) ha pedido a sus clientes que aplacen sus movimientos por el sureste de Francia a causa del fuego, que ya ha arrasado unas 240 hectáreas.
Hay unos 500 bomberos, con 170 vehículos, movilizados en este incendio, que se declaró en una zona boscosa y que aunque no afectó a ninguna vivienda obligó a cortar la línea férrea entre Marsella y Cassis.
Debido a ello fue prohibido el acceso a la totalidad de los bosques del departamento de Marsella, incluso a pie, por el riesgo extremo de incendios