El estado mexicano de Quintana Roo presentó ayer en Fitur un nuevo modelo turístico destinado a transformar la realidad social, más sostenible, que “da un giro” a las políticas anteriormente aplicadas al sector.
“Nuestra nueva política está dirigida a garantizar el ordenamiento del territorio, la suficiencia de infraestructuras para zonas nuevas, pero también para la población”, explicó a Efe la secretaria de Turismo de Quintana Roo, Marisol Venegas.
Se trata de que “la desigualdad no acompañe al turismo, sino de que el turismo genere un combate a la desigualdad y que el bienestar sea compartido”, indicó Venegas.
Los destinos deben ser “de primera”, dijo, “con ciudades también de primera, y no la distancia que se generaba en el modelo turístico anterior”.
Quintana Roo prepara una nueva estrategia que tiene como punto “muy importante la diversificación económica.
“Estamos trabajando en nuevos sectores económicos, en usar nuestra conectividad de aeropuerto para hacer conectividad con el Caribe, algo importantísimo porque no existe. Cualquier persona que quiera viajar, incluso entre las islas, tiene que pasar por Miami.”, destacó Venegas.
“En este caso nosotros podríamos resolver incluso temas de visado, no todos los países pueden, y convertirnos en una suerte de distribuidor regional”, añadió.
La secretaria de Turismo aclaró que dentro del plan se están emprendiendo acciones que no solamente tienen que ver con la cultura “si no también con la educación, la formación de trabajadores, y el desarrollo social que va aparejado al desarrollo turístico”.
“La idea no es llevar más turistas. El turismo tiene que crecer, porque es una industria grande, pero que sean mejor, que generen más distribución, que se muevan más, que conozcan nuestra propia cultura, que salga de los hoteles”, dijo Venegas.
Y entre las ofertas estrella de ese plan se encuentra la zona arqueológica de XKabal, del periodo preclásico maya, a 20 kilómetros de la población de Bacalar.
En torno a ella se ha construido un nodo de desarrollo que funcionará como el gran vector de toda la zona.
“La idea es que la zona sur del estado, en la que estamos invirtiendo mucho esfuerzo porque hay que darla a conocer más, tenga su propio turismo. Es una zona riquísima, frontera con Belice”, subrayó.
Más de 180.000 españoles viajan cada año a Quintana Roo, lo que supone casi la mitad de los turistas que visitan ese estado mexicano.
El 87% del PIB de Quintana Roo está en el sector servicios y genera que más de 450.000 personas dependan de forma directa del turismo
