El sector turístico encara con optimismo la temporada de invierno y espera que sea mejor que la anterior, con el turismo de nieve como gran protagonista, el de sol y playa en Canarias, y el urbano en auge, con Madrid a la cabeza.
Las estaciones de esquí españolas han asegurado que la nueva temporada de nieve arranca con “muy buenas expectativas”, gracias a la meteorología, que ha permitido abrir estaciones como Masella el pasado fin de semana, Baqueira Beret el próximo 18 de noviembre y prácticamente todas las restantes el día 25.
Los hoteleros esperan un aumento del número de pernoctaciones, así como del precio medio y la rentabilidad, gracias a la buena evolución tanto de la demanda extranjera como de la nacional, según el presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turístico (Cehat), Juan Molas.
El secretario general de la patronal, Ramón Estalella, ha destacado una tendencia de crecimiento en la demanda española, lo que considera “muy buena noticia” porque hay destinos en España a los que no llega el turista extranjero y su clientela es mayoritariamente nacional.
En cuanto a los mercados emisores extranjeros, la patronal prevé que Francia será el que más crezca, seguido de Reino Unido, Alemania y los países nórdicos.
La temporada de invierno va a ser muy buena no sólo para el archipiélago canario, para el que 2017 será el mejor año turístico de la historia, sino también para destinos urbanos como Madrid, Valencia, Granada, Sevilla, Málaga o Córdoba, que muestran un buen comportamiento, ha destacado el presidente de Cehat.
Canarias cerrará el año, según Cehat, con 16 millones de turistas, frente a los 15 millones del año anterior, un aumento que supondrá un incremento de cinco puntos en su ocupación, mejor ingreso por habitación disponible (RevPar) y un 7,5 % más de empleo.
Las estaciones de esquí han invertido en conjunto 26,5 millones de euros, un 32,5 % más para la temporada 2017-18, sobre todo para mejoras en la fabricación de nieve artificial con cañones de nueva generación, para no depender solo de las condiciones atmosféricas, según la presidenta de la Asociación Turística de Estaciones de Esquí y Montaña (Atudem), María José López González.
Las estaciones esperan superar o al menos igualar los resultados de la temporada pasada, que cerró con 5,4 millones de visitantes, un 13,8 % más, y una facturación por remontes de 118,7 millones de euros, un 22,5 % más.
Estas buenas perspectivas hacen pensar que se cumplirán las previsiones que apuntan a la llegada de más de 80 millones de turistas internacionales a España en 2017, pese a la crisis política en Cataluña y la recuperación de varios mercados competidores.
Molas ha explicado que hay cierta lentitud en las reservas para el verano de 2018 en relación con el mismo período del año pasado, con un descenso del 6 %, por la recuperación de destinos competidores en el segmento vacacional, como Grecia y Turquía, debido sobre todo a los precios más baratos.
La crisis política catalana ha reducido entre un 13 % y un 14 % la facturación de los hoteles de Barcelona en octubre pasado y un 7,5 % la ocupación.
No obstante, el sector espera que si la situación política mejora y se rebaja la tensión, la crisis pasará como “un punto y aparte” con un 2018 “absolutamente normalizado”.