El principal aeropuerto de Seúl ha estrenado un servicio de almacenaje y envío a domicilio para aquellos artículos que son normalmente requisados en el control de seguridad al estar prohibidos a bordo de los vuelos comerciales.
El operador del aeropuerto de Incheon, el que brinda servicio internacional a la capital de Corea del Sur, y el Ministerio de Transporte han activado este servicio a partir de agosto para el envío de productos como encendedores, pilas o líquidos o productos cosméticos en contenedores de más de 100 mililitros, según recoge la web de la radiotelevisión pública surcoreana KBS.
El servicio, que opera de 6.00 a 20.00, se ha lanzado ante el creciente número de artículos prohibidos confiscados en los controles de seguridad (más de tres millones en todo 2016).
Desconocimiento de las normas
La operadora del aeropuerto considera que pese al incremento en la señalización muchos pasajeros aún siguen sin conocer bien la lista de objetos no permitidos a bordo por lo que no los facturan, y se han recibido muchas quejas, especialmente cuando lo confiscado son cosméticos, encendedores o bebidas alcohólicas de cierto valor.
Los pasajeros pueden ahora depositar los artículos en un mostrador situado junto al control de seguridad y abonar una cantidad a partir de 3.000 wones (unos 2,25 euros/2,65 dólares) para almacenaje o a partir de 7.000 wones (unos 5,25 euros/6,20 dólares) para el servicio de entrega a domicilio tras rellenar un formulario.
Incheon, elegido mejor aeropuerto del mundo cada año desde 2006 por el Consejo Internacional Aeroportuario, ya lanzó también en 2016 un alquiler prendas de abrigo pensado para que pasajeros que viajan desde climas cálidos puedan soportar el duro invierno surcoreano sin tener que comprar ropa solo para el viaje ni transportarla.