Esta enorme isla indonesia esconde tesoros culturales y naturales que vale la pena conocer, ya que constituye el último refugio para algunas tradiciones milenarias
Tras pasar unos días entre templos en la isla de los dioses (Bali), disfrutar de las apacibles islas Gili (archipiélago de Lombok), descansar cuerpo y mente en la isla de Java y explorar las islas Nusa (región de Bali), vale la pena dirigirse a la isla indonesia de Sulawesi para descubrir culturas y creencias tan ancestrales como sorprendentes.
Ya sea porque vienes en barco desde la isla de Flores o bien en avión desde la isla de Bali o Lombok, la entrada a Sulawesi desde el sur es Makassar, una ciudad de paso (ya lo advierten los guías en el aeropuerto), desde la que es fácil acceder al interior de la isla.
Rituales funerarios de los Tana Toraja
Para conocer en primera persona los rituales funerarios de los Tana Toraja, la mejor opción es dirigirse en bus público desde Makassar a Rantepao. Hay buses diurnos y nocturnos para este trayecto de aproximadamente nueve horas (el nocturno sale sobre las 21.00 horas y llega a las 6.00 de la mañana). La mejor opción al mejor precio es la compañía Charisma, buses con aire acondicionado, asientos reclinables y con manta y almohada.
Rantepao es el mejor punto de partida para recorrer la región Toraja, en el Sur de Célebes Meridional. Una vez aquí ya es fácil moverse por el interior de Sulawesi y conocer a fondo sus ambientes rurales, arrozales, casas tradicionales, ideales y costumbres.
Lo más famoso de la región Toraja son los ritos funerarios de este grupo indígena, basado en la creencia de que el alma permanece en el cuerpo cuando muere, de ahí que haya que celebrar la muerte del familiar con música, baile, actuaciones en directo y un buffet libre para todos los asistentes al evento. La calidad y abundancia de este festín, dependerá del poder adquisitivo del difunto y de sus familiares.
Los funerales de los Toraya (así se pronuncia en indonesio) resultan muy costosos y, a veces, las familias tienen que tener el cadáver guardado meses o años hasta que reúnen el dinero suficiente para celebrar un funeral digno para este grupo étnico. Varios días de fiesta y matanzas a las que asiste todo el pueblo: conocidos, desconocidos, turistas y curiosos.
Al llegar a Rantepao, te asaltaran guías locales para ofrecerte conocer los funerales (tomates en indonesio) de ese día. Te dirán que no es posible hacerlo por tu cuenta, que no vas a encontrarlos, que no te van a dejar entrar y que no solo se puede ir en transporte privado, pero esto no es cierto. Hay transporte público y es posible moverse por la zona en bemos, pete-pete (minibuses) o en coche público compartido.
En Rantepao hay una oficina de información turística gubernamental, en la que deben facilitar información al turista, pero no es nada fácil obtener la información sobre los lugares y las fechas en las que se celebran los funerales de la zona para visitarlos por tu cuenta. Eso sí, están obligados a exponerlos en una pizarra que hay en la parte trasera. Fíjate en esta pizarra y pregunta directamente por el significado de cada fecha, así conseguirás organizar tus visitas.
Una vez que conozcas donde se celebran los funerales cada día, sólo necesitas coger un bemo (transporte local) e indicarle el nombre de la aldea. Nada más llegar, los guías os mirarán y os preguntarán si habéis ido solos, lo mejor es decir que vuestro guía esta fuera.
No está bien visto acudir por tu cuenta (en esto se basa el negocio local). Recuerda que es necesario siempre llevar alguna ofrenda para la familia, lo más normal aunque pueda parecer extraño es llevar tabaco.
El funeral es una especie de ceremonia católica con cantos, rezos, etc… pero después empiezan a repartir comida y refrescos entre todos los asistentes, mientras que van matando a los cerdos y búfalos que después comparten también. Es un evento no apto para personas muy sensibles, pero vale la pena acudir para conocer otra cultura y otros ritos.
Cueva de Londa
Tras asistir a un funeral, otra parada obligatoria de la zona es la cueva de Londa. Desde la misma oficina de información turística que está en la carretera principal al lado del hospital, puedes dirigirte a Alang-Alang en transporte público y desde aquí sale un desvío a la derecha (arriba indica Londa). Un paseo agradable de 3-4 kilómetros rodeado de vegetación y aldeanos que saludan al pasar mientras indican que Londa es siguiendo recto.
La cueva de Londa es una visita recomendable y necesaria para conocer algo más de esta cultura. La entrada cuesta 20.000 rupias (1,25 euros) y si no llevas linterna tendrás que pagar 30.000 rupias más (1,90 euros).
Las casas típicas toraja de Kete Kesu
Otro lugar para visitar desde Rantepao es Kete Kesu, a 5 kilómetros. Se puede llegar en bemo por 5.000 rupias (0,30 euros) diciéndole que vas a Kete.
Es una aldea de casas típicas torajas muy cuidada y orientada al visitante. Cuesta 20.000 rupias (1,25 euros) y se puede visitar en una hora, incluyendo unas cuevas que hay al final.
Los mercados tradicionales de Bolu
A unos 2,5 kilómetros de Rantepao se encuentra Bolu y se puede ir en bemo por 3.000 rupias (0,20 euros). En este pequeño pueblo hay mercado los martes y los sábados y, si te coincide que estás por la zona, no te puedes perder este espectáculo.
Por una parte está el mercado tradicional en el que destaca la cantidad de puestos de café toraja y los puestos de comida tradicional, donde tienes que probar una especialidad de fideos. (“Mie” significa fideos en indonesio). En el exterior está el mercado de búfalos, que es donde los indonesios compran los búfalos que posteriormente sacrifican en los funerales.
La zona de Toraja es recomendable para conocer una cultura totalmente diferente a la nuestra. La forma de afrontar la muerte de los familiares y la veneración por los cuerpos es algo que impacta, de ahí que haya que reservar 2-3 días para conocer esta zona.
Igualmente de impactantes, pero mucho más violentos son los ritos funerarios de Papúa Nueva Guínea, donde la etnia Dani, una tribu indígena que habita en la isla, corta parte de algún dedo a las mujeres y niños cuando alguien muere como muestra de su dolor. En función de la reacción de la persona, el sacerdote decidirá si se corta algún dedo más para posteriormente realizar un collar de dedos que se coloca en el cuello del difunto al enterrarlo. Hoy día se está intentando acabar con este macabro ritual.
Los fondos marinos de Bunaken
Sulawesi es también el refugio de uno de los fondos marinos con mayor biodiversidad del planeta y un destino inigualable para los amantes del buceo y el snorkel.
Existen gran cantidad de puntos para hacer inmersiones de buceo a lo largo y ancho de la isla, pero la zona norte de Sulawesi esconde los mejores tesoros submarinos. Desde la ciudad de Manado se accede a las islas que componen el parque nacional marino de Bunaken, un archipiélago compuesto por cientos de islotes entre los que destaca la pequeña isla de Pulau Bunaken. Este destino turístico para buceadores es la isla que atrae a mayor cantidad de viajeros impacientes por conocer algunos de los fondos marinos más impresionantes del planeta.
Aunque posiblemente la especie más conocida de Indonesia sea el dragón de Komodo, el archipiélago de “Tamal Nasional Bunaken” está protegido por un inmenso arrecife de coral, hogar de multitud de especies de peces y organismos marinos en el que cada día es posible disfrutar de una gran diversidad marina.
Las islas han conseguido mantener e incluso aumentar su biodiversidad gracias a políticas de protección que han permitido a sus habitantes obtener de los buceadores los beneficios que previamente obtenían mediante la pesca con dinamita. Para mantener este paraíso natural, los viajeros deben pagar una tasa de protección al realizar las inmersiones. Estas tasas, que pueden parecer abusivas, son la garantía para que estos paraísos subacuáticos no se conviertan en desiertos de coral muerto como ocurre en Gili Air.
Llegar a la isla de Pulau Bunaken puede ser rápido y cómodo en embarcaciones privadas que se ofrecen al turista en el propio puerto de Manado. Sin embargo, si se dispone de tiempo, paciencia y ganas de conocer la forma de transporte local, recomendamos llegar a las islas en los barcos públicos que cada día transportan personas y mercancías inverosímiles desde la isla de Sulawesi hasta las pequeñas islas que conforman el parque natural marino de Bunaken.
La isla de Bunaken está salpicada de alojamientos enfocados al buceo donde es bastante económico alojarse si se contratan inmersiones o cursos de submarinismo. Normalmente estos alojamientos incluyen pensión completa, ya que más allá del buceo o el snorkel, la isla no ofrece grandes atractivos ni culturales ni culinarios.
Junto con el archipiélago de Raja Ampat, en Papúa Occidental, y algunos puntos de inmersión en Filipinas, Bunaken constituye la mayor reserva de vida marina del sudeste asiático, que nada tiene que envidiar al gran arrecife de coral australiano.
Fuera del agua, otro atractivo natural del norte de Sulawesi son los Tarsos, la especie de primate más pequeña del planeta que comparte país con los grandes orangutanes de la isla de Sumatra o Borneo (Kalimantan). Estas graciosas criaturas son únicas en el mundo y se encuentran exclusivamente en el parque natural Lore Lindu (Sulawesi) y en la isla de Bohol en Filipinas.
El secreto de las islas Togian
Pero si lo que realmente estás buscando son playas paradisíacas de arena blanca y aguas cristalinas, Sulawesi esconde un rincón espectacular. Las islas Togian constituyen un pequeño archipiélago en el centro de Sulawesi que, a día de hoy, sigue estando poco concurrido por turistas, entre otras razones porque llegar hasta aquí no es precisamente rápido ni sencillo.
Otro inconveniente para muchos, que ha permitido que este remoto lugar siga siendo tan auténtico, es que no dispone ni de cobertura de teléfono ni wifi. Por otra parte, el acceso a la luz eléctrica y agua corriente está restringido a ciertas horas del día. Todos estos inconvenientes se compensan con creces cuando llegas a sus playas y te sumerges en sus aguas cristalinas. Las islas Togian son accesibles en ferry o speed boat desde las ciudades de Ampana y Gorontalo, a las que solo es posible llegar por tierra tras largas horas por carreteras algo complicadas.
Celebrar la muerte con un festín, convivir en una aldea local, bucear junto a especies únicas y desconectar en paraísos inolvidables son algunos de los atractivos que no te puedes perder en la mística isla de Sulawesi.
Alejandra Chito, es periodista y un día decidió que quería comunicar de una manera diferente: a través de sus viajes. Una pasión que la convirtió en una nómada aventurera que ya ha recorrido numerosos puntos del planeta. Esta malagueña inquieta está especializada en viajes ‘low cost’ y a través de sus experiencias el viajero descubre como sacar lo máximo de un destino.
